EL PODER EN EL GRAN PODER

Análisis del artículo:

LA ENTRADA DEL GRAN PODER: Una historia de poder y estatus de ser individual a ser colectivo

Realizado por: Juan Carlos Patzi Mejia

Nuestras tradiciones

La majestuosidad que hoy se expone en las diversas entradas folklórico-culturales  y fiestas patronales en nuestra ciudad, han sufrido con el tiempo un cambio drástico y prepotente ante la mirada atónita de una sociedad en un proceso de evolución y surgimiento de clases anteriormente subyugadas a los designios de las clases dominantes socialmente, con un estatus dado por la educación y por la actividad económica en la cual se encontraban inmersos.

Hoy en día, las clases sociales denominadas bajas y medias, han desarrollado una revolución en pos de la inclusión dentro de las costumbres de la sociedad aquellas tradiciones que en otrora solamente eran practicadas entre aquellos grupos de individuos que eran marginados por su nivel educativo, su preferencia sexual, religiosa, económica, su condición de vida o por sus costumbres ancestrales, cambiándose los valores éticos tradicionales por los monetarios en un desarrollo económico dado innegablemente por el esfuerzo demostrado en la mayoría de los casos en el trabajo cotidiano y actividades exclusivas de algunos grupos que por su percepción social no serían desarrollados por otras personas.

El Gran Poder ayer y hoy.

La zona del Gran Poder denominada así por su influencia religiosa y el estatus social que sus habitantes gozaban en el siglo XX que era básicamente de comercialización de productos tradicionales y artesanías desarrolladas por sus pobladores las cuales eran buscadas por todos los habitantes de nuestra ínclita ciudad desplazándose desde los sectores más alejados a buscar artículos que por su precio accesible y peculiar belleza eran relativamente exclusivos para quienes los adquirían, con los cambios político-sociales a los cuales se ve inmerso nuestro país es que se produce en una primera instancia una producción masiva de productos y posteriormente una comercialización de productos eléctricos, línea blanca, aparatos exclusivos para actividades particulares como gimnasios y otros se ve en un creciente auge económico lo que les permitió romper las barreras sociales y cambiarlas por barreras económicas donde los que pueden pagar pueden acceder, la educación fue una de ellas y si bien en una primera instancia no se permitió su inclusión en colegios privados hoy es un derecho ganado por los comerciantes quienes sin estudios exclusivos solamente con el aprovechamiento de las oportunidades presentadas por las necesidades de la sociedad cuentan con los recursos para construir edificios, conducir autos de lujo que en el siglo pasado era privilegio de la clase mal llamada “alta” y por su tez blanca podían despreciar este poderío económico que hoy es latente aunque en algunos casos mal administrado por demostraciones que no son necesarias.

Es así que la entrada del Señor del Gran Poder fue creciendo desde inicialmente esta popular zona hasta la captura de las principales calles y avenidas de nuestra ciudad, la cual es nuevamente fuente de ingresos para aquellos que se atreven a aprovechar la necesidad de la gente que quiere mayor comodidad para ver una demostración cultural y folklórica de nuestras danzas y faustuosas vestimentas arregladas especialmente para la festividad donde lo religioso y la devoción pasa a segundo plano y prevalece lo económico con grandes fiestas donde lo último que se pretende es rendir culto a una imagen que por muy milagrosa que fuese no es el actor principal de la fiesta, siendo cambiada por las bandas de gran cantidad de músicos, conjuntos musicales modernos y con temas musicales que no son parte de una fiesta religiosa por el contenido de sus letras que hablan de sexo, asesinato, prostitución, alcoholismo y otras que la gente disfruta como la más elegante de las virtudes de la sociedad moderna.

Al finalizar esta fiesta

Al concluir este referente de exposición folklórica cultural se ve la verdadera esencia del ser humano que si bien ostenta los recursos económicos pero muestra la débil educación con la que cuenta demostrando sus verdaderos complejos y su sentimiento de inferioridad, atrapando a un sector en pos de una superación camuflada en una máscara de poder económico con la finalidad de mejorar su estatus social.

Bibliografía

Aranda Manrique, Pablo (2014), LA ENTRADA DEL GRAN PODER: Una historia de poder y estatus de ser individual a ser colectivo, Revisado el 2014 en la dirección: http://www.cepbo.blogspot.com/2014/07/la-entrada-del-gran-poder-una-historia.html